Zaragoza no se rinde, decía Benito Pérez Galdós en sus Episodios Nacionales de las llamadas guerras napoleónicas. Tal es la naturaleza maña que ahora se lanza en defensa de la creación de una red de comedores universitarios sostenibles en España. Apelando a las conciencias de los distritos universitarios, un grupo de estudiantes de la Facultad de Veterinaria y algunos otros centros universitarios, reclama comidas sociales sostenibles, con alimentos de proximidad, sanos, limpios, justos con los agricultores de nuestro entorno y bien cocinados.
Mensa Cívica, que está promoviendo esta Red en España, considera que es un deber moral, ético y educativo de las Universidades el secundar este llamamiento y apoyar una revisión de la comida. Y nada mejor para ello que comenzar a experimentar en varios distritos universitarios. Poniendo en marcha, tal como se está haciendo en Francia, una revisión de los pliegos de adjudicación de la restauración colectiva. Iniciando el diálogo entre productores de proximidad, catering y los equipos rectorales y los estudiantes. Y en esta tarea tampoco se debe inhibir el profesorado y el PAS que trabaja en la Universidad. La comida social de calidad en el trabajo es un derecho al que los estudiantes y trabajadores deben defender como parte de las conquistas sociales que ahora tratan de eliminarse.
Esperamos que tras este acto, otros comiencen a secundarse en España y pronto podamos trabajar en Red los estudiantes, profesores y equipos rectorales dispuestos a hacer de nuestros campus, unos campus responsables (sostenibles y saludables) y ligados a lo que sucede en su entorno. En esta tarea no podemos dejar de pensar en la calidad del pan, en la defensa de un agua pública y de calidad, en el rescate de la horticultura de los entornos, en una ganadería sostenible, en normalizar los alimentos ecológicos y en evitar modelos alimentarios ajenos a nuestras propias decisiones como nación.